El ministro de Gobierno, Carlos Romero, confirmó ayer que un capitán de la Fuerza Aérea Boliviana (FAB) fue capturado en una pista clandestina del Parque Madidi, departamento de La Paz, en el momento en que pretendía trasladar más de 362 kilos con 600 gramos de pasta base de cocaína en una moderna avioneta.
Se trata de Jimmy José Urzagasti Zabala, oficial con grado de capitán de la Fuerza Aérea Boliviana (FAB), quien fue detenido el jueves por la Policía antidroga en posesión de casi 400 kilos de droga en la provincia Inquisivi del departamento de La Paz.
El militar tiene registros de antecedentes. En enero, aparentemente fue secuestrado por tres sujetos en Santa Cruz y luego de algunos días fue hallado con signos de violencia en Yapacaní. En esa oportunidad le dieron medidas sustitutivas por simulación de delito.
Fingió secuestro. El 11 de enero, el piloto presuntamente fue secuestrado por tres sujetos de la terminal bimodal del Santa Cruz cuando llegaba de Roboré, donde cumplía tareas de instructor de vuelo.
Según un reporte del periódico El Día del 5 de febrero, la Juez de Yapacaní, Virginia Cachay determinó medidas sustitutivas a la aprehensión de Urzagasti luego de permanecer desaparecido por algunos días fue hallado con evidentes signos de violencia en Yapacaní.
El mismo medio informó en aquella oportunidad que “el piloto de la Fuerza Aérea Boliviana contó una historia sobre un supuesto plagio que habría sufrido al llegar a la terminal Bimodal de Santa Cruz, además habría estado privado de su libertad durante 11 días, pero en todo ese tiempo su familia no reportó el hecho y tampoco recibieron llamadas exigiendo recompensa, 11 días después del supuesto secuestrado aparece golpeado y con lesiones y aduce haberse escapado por sus propios medios”.
Detalles
Altos jefes policiales implicados
Involucrados. En los últimos 15 años, cuatro generales, dos ellos que fungieron como comandantes de la institución del orden fueron involucrados en delitos: Óscar Nina y René Sanabria por vínculos con el narcotráfico; Wálter Osinaga y Óscar Jaen por protección en caso de robo agravado.
Otros. A ellos se suman altos jefes que van desde tenientes coroneles como Blas Valencia por robo agravado y condenado a 30 años de cárcel, mayor Fabricio Ormachea por extorsión condenado a seis años en Estados Unidos, capitanes y otros oficiales que en diferentes hechos estuvieron involucrados en actividades ilícitas.
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