Carmen quería ser policía para defender a las mujeres

Carmen Rosa Mollo (17) vio que en su comunidad, Chirapaca (La Paz), las mujeres eran víctimas de violencia y por eso tenía el propósito de ser policía o militar, para tener autoridad y luchar contra esos abusos. Con ese fin decidió prestar su servicio premilitar este año, pero solo encontró la muerte.

Ella era la menor y única mujer entre cinco hermanos. Ayudaba en casa con todas las labores luego de ir al colegio, siempre pensando en que al llegar el sábado debía embarcarse en un vehículo con rumbo a Achacachi, para recibir instrucción premilitar en el Regimiento Ayacucho. La rutina se repitió hasta que dos uniformados de bajo rango la vejaron y quitaron la vida el 28 de agosto, luego de doparla.

Según la madre de la víctima, quien pidió que su nombre no sea publicado, a Carmen le gustaba estar en contacto con sus compañeros y vecinos, por lo que era conocida por su comunidad y en la provincia Los Andes. Incluso decían que ella era una dirigente innata, pues participaba de todas las actividades que se realizaban en la zona y siempre luchaba por los derechos de las personas.

Entrenamiento. La gente del lugar relata que ella sobresalía más que todo en las actividades deportivas, ya que representaba a la comunidad en diferentes campeonatos.

Carmen habría decidido ingresar al servicio premilitar por sus condiciones físicas y encaminar su objetivo de vestir uniforme, pero cuando dio a conocer esa decisión su madre se opuso. Sin embargo, la joven se propuso cambiar la perspectiva de su progenitora y para ello, primero, acudió —con éxito— a sus hermanos; luego, a sus vecinos y amigos de la familia, quienes lograron convencer a la madre para que la deje incorporarse al cuartel de Achacachi, distante a una hora de viaje. Ahora, en su vivienda se ve una tricolor con un crespón negro.

El hermano mayor recordó junto a su progenitora que la actitud de su hermana demostró que realmente deseaba ser uniformada. “A ella le gustaba tanto el uniforme que decía que quería ser militar o policía; esto para poder defender a las mujeres de mi comunidad, ya que vio que a algunas de ellas les pegan. Por eso también decía que no quería tener marido, por lo que prefería estar de uniforme para defender a las esposas”, contó desconsolada la mamá de la víctima. Por esa razón, Carmen inició su vida militar junto con su prima y otras compañeras de colegio y vecinas.

A casi un año de prestar el servicio premilitar y tener confianza en los instructores y camaradas, el 28 de agosto, Carmen Rosa fue vejada junto a su prima, quien salvó la vida el 29 de agosto. Ambas asistieron a una cita con dos sargentos, luego fueron a un domicilio donde ambos instructores les habrían invitado bebidas alcohólicas con un sedante. Después, su familiar despertó desnuda y vio que cerca de ella estaba Carmen, ya sin vida. Sus agresores, luego, fueron a botarla en un pastizal.

Los acusados están encarcelados en el penal de San Pedro, pero el lunes compañeros y familiares bloquearon la carretera a Achacachi exigiendo justicia y que se los traslade a la cárcel de Chonchocoro. La medida fue suspendida ayer. La víctima fue enterrada la tarde del lunes en Chirapaca.

Sancionan a militares

Proceso

El comandante del Ejército, general Omar Salinas, informó ayer que los dos sargentos acusados fueron sancionados con el retiro obligatorio de la institución. Estos exmilitares deben ser procesados en la Justicia Ordinaria.