Nuevos conscriptos coinciden que servir a la Patria es un deber

Recibidos con una diana interpretada por la banda de música de la Segunda División del Ejército y dejando a sus padres fuera del Regimiento de Artillería I "Eliodoro Camacho", varios jóvenes desde ayer, se presentan en esas instalaciones para cumplir con su servicio militar, coincidiendo con que "servir a la Patria es un deber".

Algunos "armados" simplemente con una maleta de madera, pero todos con un folder con sus documentos, uno a uno ingresaron a dicha guarnición donde tras registrarse y ser inscritos, pasaron por el consultorio donde se les hizo la revisión médica para cumplir con todos los requisitos y ser declarados como aptos para quedarse por un año en ese regimiento.

"Estoy tranquilo, estoy bien, soy de Machacamarca y mi amigo me animó, es un deber servir a la Patria", "Estoy listo para presentarme al cuartel, servir a la Patria es un deber, hay que servir a la Patria, es un orgullo, quiero cambiar mi actitud y aprender todo de mis instructores", fueron algunos de los criterios que mencionaron los nuevos soldados como Isaac Mamani o Moisés Basco, antes de formar parte de la familia del Regimiento "Camacho".

Desde ayer, se inició el reclutamiento en todo el territorio boliviano, uno de los cuarteles más codiciados es el Regimiento Camacho, donde su comandante, el coronel Isaac Pérez detalló que solo existen 224 plazas y el resto deberá ir a otro destino, también dependiente de la Segunda División del Ejército, calculando una o dos semanas para cubrir este cupo.

"Los requisitos que debe cumplir el joven ciudadano que venga a presentarse es tener su certificado de nacimiento original y su carnet de identidad. Decirles a todos los jóvenes que están comprendidos en la edad militar de 17 a 22 años, que los centros de reclutamiento están abiertos para hacer su servicio militar, los que quedan dentro la guarnición o los voluntarios que busquen otra", afirmó la autoridad militar. Entre tanto, mientras los jóvenes ingresaban al cuartel, los padres de familia, se quedaron fuera del recinto militar, a la espera de una respuesta positiva de sus hijos, quienes se quedarán a pasar instrucción durante un año, como estipulan las normas bolivianas.