El Ejército aplica desde ayer un inédito cerrojo en los 850 kilómetros de la frontera con Chile para enfrentar al contrabando y delitos conexos. Un contingente militar aplica desde este fin de semana un patrullaje permanente, especialmente en pasos ilegales.
“A la cabeza del Comando en Jefe de las Fuerzas Armadas hemos iniciado el plan en la frontera con Chile, estamos controlando la línea fronteriza dando cumplimiento a las políticas de lucha contra el contrabando y otros delitos transnacionales. Podemos decir en pocas palabras que estamos paralizando la frontera para evitar que esto siga haciendo daño a la seguridad y la economía del país”, informó ayer a L A R AZÓN el viceministro de Lucha contra el Contrabando, Gonzalo Rodríguez.
La autoridad explicó que el operativo durará varios días (no quiso precisar por razones de seguridad), específicamente en las 118 rutas ilegales construidas por contrabandistas y otros delincuentes. Estas sendas están dispersas en los 850 kilómetros de línea fronteriza que existe entre Bolivia y Chile.
Según la percepción de Rodríguez, es un “cierre controlado momentáneo” que obligará a los contrabandistas a llevar su mercadería a los puntos primarios de control en Charaña, Pisiga y Tambo Quemado. “Acá se mostrará la capacidad real del movimiento de tropas de nuestras Fuerzas Armadas”, puntualizó la autoridad.
Este plan está en el marco del pedido del presidente Evo Morales a los nuevos jefes del Alto Mando Militar de frenar “la agresión económica” que se produce por efecto del contrabando.
El Ejército desplazará unos 8.000 uniformados a la frontera con Chile para encarar esa tarea. Rodríguez reveló que la preocupación del Gobierno está centrada en la Zona Franca de Iquique, que capta productos especialmente asiáticos para venderlos sin impuestos, tanto en Chile como a los países vecinos.
Señaló que en los últimos seis meses, $us 2.300 millones en mercadería se movieron en ese puerto. “De esa cantidad, ellos vendieron $us 2.107 millones, de los que el 58% se trasladó a la frontera con Bolivia y eso quiere decir que $us 1.220 millones van directamente al contrabando que ingresa a nuestro país”, remarcó Rodríguez.
Añadió que en este caso solo se habla de Iquique. El presidente Morales aseguró el domingo, que si Bolivia tendría una salida soberana al océano Pacífico y no existiera el contrabando, el crecimiento económico del país sería un 2% más de lo que es actualmente, de modo que se superaría el 6%.
Este año se prevé que ese indicador cierre en un 4,7%. El ministro de Defensa, Javier Zavaleta, acusó a Chile de no ejercer un adecuado control al contrabando y permitir el ingreso de mercadería ilegal al país, tras la inauguración de uno de los 25 puestos adelantados proyectados por el Gobierno; 19 en la frontera con Chile y seis con Perú.
Allí, además, se instaló un domo para el control de las operaciones destinadas a enfrentar al comercio ilegal. Rodríguez adelantó que para fines de enero de 2019 se entregarán cinco puestos adelantados y cada uno de ellos tendrá la posibilidad de ejercer un control directo sobre 250 kilómetros de la frontera.
El 11 de marzo hubo un incidente en la frontera común de Bolivia y Chile que provocó la muerte de dos militares bolivianos en inmediaciones de Sabaya, Oruro.
Este hecho provocó medidas mucho más drásticas para evitar la ilícita actividad, además de la creación de un viceministerio con capacidades operativas. De acuerdo con un reportaje publicado por L A R AZÓN en noviembre, Bolivia soporta la mayor ola del contrabando de los últimos años. (29/12/2018)
