Nuevo jefe de las FFAA recuerda que gerente de TAM aún no tiene sentencia

El flamante comandante en jefe de las Fuerzas Armadas (FFAA), Luis Orlando Ariñez Bazán, manifestó que a los altos jefes acusados de presuntos hechos de corrupción, casos que se ventilan en la justicia ordinaria, debe aplicarse el precepto constitucional de la presunción de inocencia, en tanto un juez no emita un fallo.

Así respondió ante la consulta de la prensa sobre los presuntos vínculos del excomandante de las FFAA, Gonzalo Durán, y del recientemente posesionado como gerente general de la Empresa Pública Transporte Aéreo Militar (TAM), Julio César Villarroel, procesados penalmente por compras irregulares en TAM, en la Fiscalía Departamental de La Paz.

“Decirle que eso se está sustanciando en las instancias jurisdiccionales pertinentes, lo que habrá que hacer es esperar los resultados que ellos evacuen, mientras tanto (se debe aplicar) lo que dice la Constitución que es presumir su inocencia”, afirmó.

En la FAB se denunciaron hechos de corrupción en TAM y en Transporte Aéreo Boliviano (TAB).

Por ejemplo, en 2007, el TAM desembolsó 1.313.444,01 bolivianos para la compra de repuestos de aeronaves (BAe-146-200). Desde ese año hasta 2014, se identificaron descargos irregulares y se desconoce el destino de los repuestos, por lo que un informe de auditoría concluyó que “existe evidencia suficiente para establecer un posible daño económico”.

Dentro de este monto, Durán fue sindicado de firmar un cheque por 522.920 bolivianos para concretar la compra de frenos y otros repuestos en favor de Villarroel, quien era director general de TAM.

“Resulta de que hay un proceso, usted tiene que saber igual o más que yo, el proceso sumarial es previo y después se los deriva a la justicia ordinaria, la justicia militar, se los deriva a proceso disciplinarios administrativos internos, entonces se tuvo que haber pasado por todo en esa instancia”, señaló Ariñez, ante la insistencia de los medios sobre estos hechos de corrupción a tiempo de asegurar que no se encubrirá a nadie.

El nuevo comandante de la FAB, Erwin Bonilla Castellón, apoyó a Ariñez al señalar que el caso debe ventilarse en la justicia ordinaria y recordó que el nombramiento de Villarroel es una decisión presidencial, pues fue elegido de una terna presentada por las FFAA.